En la mayoría de bares y clubes de Sao Paulo, se recibe una tarjeta en la entrada que es más importante de lo que parece: te identifica como cliente y deberás presentarla a la salida.

Es bastante habitual que el pago se realicé de forma separada al servicio, con los camareros, limitándose al servicio de comida y bebida. Así, una vez hayas terminado te diriges a una caja, donde se presenta la tarjeta para realizar el cálculo y pago de la cuenta.

Suele ser similar a las tarjetas de crédito, con un código único utilizado para ir cargando en la cuenta las consumiciones realizadas, aunque también puede ser menos glamouroso: un simple trozo de cartón donde anotar lo que se consume. 

Una vez hayas pagado, te es facilitada otra tarjeta distinta a entregar en la salida, que es tu "carta de libertad" por haber abonadlo la cuenta correctamente. De esta forma, se agiliza el servicio y, lo más importante: se reducen las cuentas sin pagar.

¡Mucho ojo! En algunos bares existe una importante penalización por la pérdida de la tarjeta: guárdala en lugar seguro hasta tu salida.